CONTACTO

659268321

jueves, 13 de julio de 2017

Curiosidad sobre la Puerta de Carretas




En la entrada de hoy queremos daros a conocer la historia de la  puerta de las Carretas, los burgaleses pasamos continuamente por este paso que conecta la Plaza Mayor con el Paseo del Espolón pero que historia guarda , os lo descubrimos.

 Era una de las doce puertas que constituían la muralla erigida en Burgos en el S.XIII, en tiempos del rey Alfonso X, el Sabio.

La fachada exterior daba al río Arlanzón y la otra cara de la puerta al Mercado Menor. El nombre le viene dado porque por ella tenían entrada y salida, tanto al Mercado Menor como al Mayor, los carros y carretas que abastecían el mercado.
 
En 1527 hubo en Burgos una tremenda y violenta inundación que hizo que una buena parte de la Puerta de carretas se viniera abajo.
En 1583 se aprovechó la circunstancia de la reparación de la puerta para edificar sobre su arcada un mirador o balaustrada desde el que los miembros del Regimiento y sus invitados pudieran presenciar con comodidad los festejos que se celebraban en la Plaza, sobre todo, las corridas de toros. El coste de estas obras se sufragó con la “sisa” que se obtenía del vino que entraba en la ciudad. Esta obra fue ejecutada por Lope García de Arredondo.

Barrio y Villamar en su trabajo “Historia de Burgos” expone que: “…era muy capaz y en la parte de dentro tiene la ciudad el toril y la sala donde el Regimiento ve las fiestas que se hacen en la plaza…”


Ese mismo año de 1583 el Ayuntamiento, que entonces recibía el nombre de Regimiento, estimó que las ruedas de los carros y carretas, recubiertas de una lámina de hierro, que transportaban mercancías con destino a los mercados y que pasaban por ella, no habiendo otra solución, causaban numerosos desperfectos en el pavimento, por lo que ordenó que todos los medios de transporte no pasaran por la puerta, sino que se quedaran en el “Mesón” que el Concejo había mandado construir. Dicho “Mesón” que se hallaba situado entre la Puerta de las Carretas y el Matadero sufrió un terrible incendio y tuvo que ser reconstruido en 1589.

Esperamos que os haya gustado .

lunes, 19 de junio de 2017

EL CASTILLO DE BURGOS

El cerro del Castillo constituye un enclave estratégico de primer orden, lo que ha determinado su ocupación desde tiempos prehistóricos y, posteriormente, el que fuera el lugar elegido por el conde Diego Rodríguez de Porcelos para la fundación de la ciudad de Burgos el año 884.

 A lo largo de la Edad Media el castillo fue residencia real, reunión de Cortes, prisión y escenario de conflictos bélicos. Entre los acontecimientos más destacables sucedidos en este lugar se encuentra la boda entre Alfonso VII con Doña Berenguela de Cataluña.

 También sirvió como cárcel de presos ilustres como Garcia de Galicia, Alfonso VI y Tomás de Gournay, asesino de Eduardo II de Inglaterra. El castillo sufrió un terrible asedio durante la guerra entre Isabel la Católica y su sobrina Juana, la Beltraneja. Los defensores de la fortaleza, que apoyaban la causa de Juana, pudieron soportar tan largo asedio gracias al pozo de 63,5 m de profundidad, importante obra de ingeniería medieval, que abastecía de agua a sus moradores.

 En el siglo XVI sirvió de fábrica de pólvora (20 quintales diarios se producían en 1542) y como primera escuela de formación de artilleros del reinado de los Austria. 

En 1736 sufrió un pavoroso incendio que lo redujo prácticamente a ruinas.

 En el siglo XIX y en el contexto de la guerra de la Independencia los franceses construyeron en este lugar una moderna fortaleza que no dudaron en volar el día 13 de junio de 1813 cuando perdida la guerra abandonaron Burgos.