FACHADA DE SANTA MARÍA
La fachada de
la Iglesia de Santa María se ha convertido en el emblema de Aranda de Duero.
“Obra de muy delicado encaje que más parece filigrana… Lienzo de piedra".
Ha sido
restaurada recientemente.
Es un Fachada - Retablo, que se inició hacia
1.503 y que pudo terminarse hacia 1.515, es decir, doce años para construirla. La inaugura el Rey Fernando el católico en
una corta estancia en Aranda de camino a Segovia.
La mayoría de
la población no sabía leer ni escribir y a través de las representaciones de
la iglesia, tanto en la pintura como en la escultura, podían aprender la vida de
Jesús, de María y de la Biblia. Se intenta explicar al pueblo la religión católica
a través de escenas religiosas esculpidas en la piedra.
Es obra del último gótico, llamado Gótico isabelino, que hace
referencia a la reina que financia la iglesia: Isabel la Católica. Sería el complementario al estilo manuelino en
Portugal.
El estilo, cercano ya al renacimiento y con muchos elementos decorativos, nos hace pensar
en el círculo de la familia de los Colonia
como los maestros y artífices de esta fachada, atribuida pues a Simón de
Colonia y a su hijo Francisco. El estilo es muy cercano al que podemos ver en la fachada de la iglesia de San Pablo o del Colegio de San
Gregorio en Valladolid, así como en la capilla del Condestable de la Catedral de Burgos.
Es típica de Simón de Colonia la decoración de escamas.
TÍMPANO:
En el interior
del tímpano, podemos observar cuatro escenas policromadas que han sido restauradas
recientemente.
- En la parte
inferior izquierda vemos los primeros días de la vida de JC: el nacimiento de Jesús, rodeado de tres ángeles en el momento de su nacimiento. También encontramos representados el buey y la mula.
-
Arriba a la
izquierda: la Anunciación a los pastores.
Se pueden observar unas arquitecturas góticas que representan una ciudad con la
entrada amurallada.
- A la derecha en
la parte inferior está representada La
adoración de los reyes magos: Melchor, Gaspar y Baltasar, representando los tres continentes conocidos en ese momento: Europa, África y Asia. Cada rey tiene
una edad diferente haciendo referencia a la juventud, madurez y vejez. María
ocupa la parte central. También observamos la coronación de la Virgen por tres
ángeles, en la que se insiste de nuevo en la realeza de María..
-
y arriba: La cabalgata de los Reyes Magos de
Camino a Belén. Se distingue el Castillo de Herodes y los Reyes de camino en
sus caballos.
En el centro
del tímpano, tenemos representado con un arpa en las manos y barbas la figura
del rey David.
Esta iglesia es
llamada Santa María la Real: Santa María porque la Virgen es madre de Jesús y
la Real porque es descendiente del Rey David, ya que la Virgen y Jesús eran de
estirpe real. Los miembros de la familia de David solo se podían casar con
personas de la realeza, aduciendo que San José descendía también de la estirpe de
David.
Más abajo la
estatua de la Virgen lactante, dando
de mamar al niño. El acto de amamantar se relaciona con el carácter regenerador
de la nutrición a la iglesia. A los neófitos se les daba leche y miel tras ser
bautizados
En los arcos
de acceso a la iglesia y rodeando las puertas de madera se representan cuatro santas en cada arco: Todas son
figuras femeninas excepto dos ángeles
Para dar
arranque a la fachada hay cuatro figuras fundamentales que representan a los cuatro Santos padres de la Iglesia
Occidental: San Ambrosio, San Jerónimo, en la parte izquierda y San Gregorio Magno y San Agustín en
la parte derecha.
Figuras de seis de los Apóstoles que acompañaron a
Jesús. A los Apóstoles se les distingue por la desnudez de sus pies.
-
San Bartolomé,
San Andrés, San Pablo (a la izquierda)
-
S. Pedro, S.
Juan, Santiago (a la derecha)
La portada
consta de dos arquivoltas y en cada una de ellas se distribuyen veinticuatro santos, que corresponden con los de
mayor devoción y relevancia de la villa. Todos estos santos eran modelos para
seguir. Algunos estaban ligados íntimamente a los fieles por su oficio. Los
miembros de los gremios estaban bajo la protección de su patrón. Estos santos
protegían a la población en todo tipo de escenas cotidianas, desde la
enfermedad hasta de incendios, tormentas, etc… y podían ser de utilidad en
cualquier momento de sus vidas. No están todos identificados.
En el comienzo
de estas arquivoltas y como base de la portada están representados los cuatro evangelistas con sus respectivos
símbolos:
San Mateo con el ángel con alas, ya que su Evangelio hace mención del origen y
genealogía de Cristo.
San Marcos con el león. Autor del primer Evangelio, se decía que su voz
sonaba como el rugido de un león en sus predicaciones en el desierto. Es el patrón
de los banqueros y fuerzas de seguridad.
San Lucas con el toro. Fue pintor y conoció personalmente a la Virgen
María.
San Juan con el águila. Es el evangelio más poético y místico. Conocido
como el discípulo favorito de Jesús, era hermano de Santiago el Mayor y de
oficio pescador. Testigo ocular de Jesús
Las puertas principales se encuentran ahora
en el Museo Sacro en la Iglesia de San Juan. Realizadas por el escultor Juan
Beltrán en el siglo XVI y sufragadas por el obispo D Alonso Enríquez son de estilo
renacentista y están realizadas en madera de nogal, constando de catorce
representaciones sobre la vida de Jesús y los Apóstoles.
En la PARTE SUPERIOR – Simbología monárquica y civil
Hace
referencia a la financiación de esta: la monarquía, el pueblo de Aranda y el
obispo de Osma.
En la parte superior y más en el exterior se
encuentran los siguientes relieves:
-
A la izquierda observamos el Calvario junto con el de Jesús con la cruz a
cuestas.
-
En el centro la Crucifixión de Cristo acabando en
Corona Real.
-
A la derecha la Resurreción de Jesucristo.
-
Los escudos
reales se hallan arriba, sostenidos por leones y águilas son los Escudos de la hija de los Reyes Católicos
Doña Juana de Castilla y Felipe el Hermoso.
En 1503 se
comienza la fachada de la Iglesia. En 1504 muere Isabel la Católica. Se
inaugura la fachada en 1515 y en 1516 muere Fernando el Católico. Se suponía
que iba a reinar su hija Doña Juana, conocida posteriormente como la Loca, pero
no se suponía que la iban a encerrar en el castillo de Tordesillas. A la muerte
de Fernando el Católico, es nombrado Regente de España el Cardenal Cisneros
hasta que ocupó el trono Carlos I de España y V de Alemania, nieto de los Reyes
Católicos. Esta heráldica solo se desarrolló en su tumba en la Catedral de
Granada.
Junto a estos
escudos reales, el yugo y las flechas,
es decir Castilla y Aragón unidos en Aranda. Símbolo de Isabel (flechas) y
Fernando (yugo).
El Escudo de la Villa de Aranda: Puente sobre rio Duero. Torreón (simboliza Aranda establecida como
población) sujeto por dos leones que representaban dos hermanos de Aranda de
Duero. – D. Julián y D. Romero que defendieron la villa frente a incursiones
musulmanas.
Finalmente,
bajo los medallones laterales del calvario, en el triángulo inferior, se pueden
ver los escudos del obispo de Osma D.
Alonso Enríquez. Fue primo de los reyes católicos y obispo de 1506 a 1523
del obispado de Osma al que pertenecía Aranda. Facilitó el patrocinio de las
obras. Se reconocen los escudos de los obispos porque siempre se representa un
sombrero en la parte superior del escudo.
La fachada
tiene una serie de escamados que la
familia Colonia hizo en otros lugares, por lo que se atribuye esta fachada a
Simón de Colonia que fue el artífice de la Capilla de los Condestables.
Probablemente su hijo Francisco también le ayudara a finalizar esta obra.
Hay algo fuera
de lo corriente… los canteros a veces hacían suya la fachada y le introducían
algunos elementos decorativos que no eran muy apropiados como pequeños animales.
La Galería renacentista, última parte que se construyó de la iglesia en el siglo XVI, donde se
colocaban las plañideras cuando había funerales.
LA BAJADA DEL ANGEL del
Domingo de Resurrección todavía se celebra frente a la fachada de Santa María.
Un niño con atuendo de querubín suspendido desde un globo multicolor, dirigido
por poleas, levanta el paño que cubre el rostro enlutado de la Virgen al tiempo
que suelta un par de palomas y menea los brazos y piernas, emprendiendo
mecánica ascensión. La festividad se remonta al siglo XVIII y se celebra en
Tudela de Navarra, Peñafiel en la provincia de Valladolid y Ariza en Zaragoza.
Al finalizar este acto, comienza la procesión con un Cristo resucitado del
siglo XVII que acompaña a la Procesión con la Virgen María.